Los trabajadores que laboraban en el turno nocturno fueron secuestrados por un momento ya que no les permitirán la salida para reincorporarse a la huelga, después de varios minutos de estar encerrados les abrieron las puertas, como presión de la empresa.
Ante la falta de respuesta de Talavera Uriarte ante el conflicto laboral hacia 55 trabajadores, estalló la huelga y se realizó una marcha hacia Casa Aguayo para solicitar la intervención del Gobierno del Estado.
Fue a las 9 de la mañana que venció el plazo que otorgó la Junta Local de Arbitraje a la empresa para resolver el reconocimiento del contrato colectivo de trabajo, incremento salarial y cubrir los salarios pendientes a sus trabajadores que ascienden a 450 mil pesos.
Sin embargo, tras ser encerrados, se les permitió la salida y así comenzó la huelga y la colocación de la bandera rojinegra a las puertas de Talavera Uriarte.
Fue después de 123 meses sin huelgas Puebla nuevamente sufre un parón obligado porque la firma se negó a reconocer los derechos laborales de sus empleados, refrendados por la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.
Fue en julio previo, cuando Talavera Uriarte aceptó cubrir pagos pendientes al personal sindicalizado, con lo que se conjuró la huelga emplazada para este viernes ocho del séptimo mes a las 9:00 horas.
El lunes previo, el secretario general de la Froc-Conlabor (Consejo Nacional Laboral) en Puebla, René Sánchez Juárez, advirtió que la firma tenía tres días para hacer válido, la determinación de la autoridad laboral.
Las banderas rojinegras en la industria más antigua de Puebla de producción de talavera, es propiedad de Luis Angel Casas.
Fue la Junta Local de Arbitraje, que instruyó a la empresa firmar el contrato colectivo de trabajo, reconocer el contrato colectivo y cubrir los salarios pendientes a sus trabajadores que ascienden a 450 mil pesos.
Dentro de la instrucción del tribunal, también se ordena a Talavera Uruarte hacer una lista de trabajadores en dónde se indique su antigüedad real, su salario y su derecho a negociación de los 55 empleados que laboran en la empresa.
Para evitar cualquier reconocimiento a sus trabajadores, la empresa intentó cambiar su razón social para evadir su responsabilidad, por lo que se estableció que se identifucara su personalidad jurídica para frenar este tipo de irregularidades.
Al final, los trabajadores marcharon hacia Casa Aguayo a solicitar la intervención del Gobierno del Estado para buscar una solución definitiva a este conflicto laboral.
Al final se reunieron con Gabriel Biestro Medenilla secretaría del trabajo en el estado de Puebla en dónde iban a tener una mesa de negociación entre la empresa trabajadores y la misma estancia de gobierno.