Hace 3 semanas, un viernes por la tarde, la regidora Rosa Márquez recibió la señal.
Cuando se dirigía a sus actividades cotidianas sonó su celular y por medio de una llamada le informaban que la esperaban por la tarde-noche en Casa Aguayo.
La regidora suspendió todos sus compromisos y acudió a la cita donde le dijeron el mensaje que días antes ya había escuchado en rumores.
El interlocutor del mensaje no pudo ser otro más que el inquilino de la casa del gobierno de Puebla… “Necesitamos que tú nos representes en la elección de 2021, eres la mejor de nuestras propuestas, la más idónea por lo que no dudamos que llegaremos a buen puerto con tu perfil” Palabras más palabras menos.
Márquez Cabrera imagino que se estaba refiriendo a la diputación federal la cuál era su proyecto político, sin embargo quedó más sorprendida cuando le dijeron que la requerían para la alcaldía de Puebla capital.
Hoy la regidora una vez que ya ha platicado con su equipo de trabajo y analizado la situación política, así como los pros y los contras, ha decidido participar por la alcaldía de Puebla en congruencia con sus ideales y principios, sabiendo que hay mucho que arreglar en la capital se declara lista para competir.
Con esta decisión queda claro que Gabriel Biestro ya no es el idóneo para ser el candidato a palacio municipal, que si, en su momento así fue pensado, pero ahora solo es el plan B; y es que el desgaste mediático que provoca el ejercicio del poder coloca al diputado cómo uno de los menos populares, como el peor de los perfiles por su falta de empatía con la ciudadanía, la solución a sus demandas y lo prometido en 2018 que evidentemente nunca cumplió, como la legislación para que cancelar la concesión de agua potable en la capital, la cancelación de los fideicomisos morenovallistas, el tema del aborto y muchos etcéteras que dejará en el Congreso del estado de Puebla.
Sí ya le preocupaba a Biestro que no era bien visto por la dirigencia nacional de Morena, por la dirigencia estatal, la militancia morenista, la aparición de perfiles cómo el de José Luis Sánchez Solá “El Chelis”, el Senador de la república Alejandro Armenta, el diputado federal Alejandro Carvajal, la presidenta municipal Claudia Rivera Vivanco, la aparición de la regidora Rosa Márquez, es el último clavo al ataúd de sus pretensiones.
El único camino que le queda presidente de la JUGOCOPO, es buscar acomodo dentro del gabinete del gobierno de Puebla, desde ahí deberá trabajar los próximos tres años para ver si puede alcanzar algo en 2024 y buscar la protección y bendición de alguien más, y para ese entonces, Miguel Barbosa estará retirándose de la vida política tal y cómo lo ha comentado en diversas entrevistas, así que pareciera que políticamente, no habrá nada más para el diputado.
La presencia de Rosa Márquez sin duda levanta el entusiasmo de la izquierda verdadera poblana, de la lucha por la justicia y el verdadero aterrizaje de la 4T en el estado, y es que si alguien tiene claro los preceptos del presidente Andrés Manuel López Obrador es la regidora, quien se ha conducido estrictamente a los principios de no mentir no robar y no tradicional de ahí que su perfil tenga la aprobación de hasta la disidencia de Morena.
En hora buena por Morena, la izquierda poblana y la 4T, ahora solo esperemos los tiempos.
Manuel Ponce León.